La cultura y la comunicación son dos elementos fundamentales en la vida del individuo, conviven y se retroalimentan mutuamente. Ambas atraviesan todo proceso social. A través de ellas, el hombre se constituye socialmente, a partir de sus relaciones y en intercambios conversacionales. En esa interacción, se produce con los otros sentido y cultura.
Entonces, la comunicación no sólo es un canal mediante el cual se propaga la cultura, es además un espacio de encuentro, un proceso social en constante movimiento y producción, en el que ambas: cultura y comunicación, se sostienen y producen recíprocamente.
Mediante la comunicación se construye una trama de sentidos que involucra a todos los actores, sujetos individuales y colectivos, en un proceso de construcción también colectivo que va generando claves de lectura comunes, sentidos que configuran modos de entender y de entenderse, modos interpretativos en el marco de una sociedad y de una cultura (…) Así entendida, la comunicación no está limitada a la presencia de los medios, sino que implica además una suerte de transversalidad social y la interacción dinámica de una red de relaciones de personas y grupos donde media e intervienen otros elementos, espacios, factores, contenidos, instituciones, etc. que concurren en diversas formas y manifestaciones de comunicación. (Uranga, 2007, p.4-5)
La convergencia tecnológica y la explosión de la virtualidad, modificaron los procesos y los canales mediante los cuales el hombre se vincula social y culturalmente. Esos cambios, también modificaron las formas de producir y de consumir, alteraron las industrias y presentaron nuevos espacios de encuentro y de interacción. Pero el cambio no es estático, permanece en constante movimiento.
Reconocerlos, instrumentarlos y analizarlos, permitirán fundar una mirada prospectiva, entender esta nueva dinámica, desde una perspectiva crítica, permitirá aprovechar los desarrollos emergentes y proyectar alternativas de intervención hacia el futuro.

- Profesor: Administrador Del sitio
- Profesor: Laura Orgoñ